Viva la vida de Coldplay

Dice la canción: un día fue el rey del mundo, tenía mucho éxito, se creía más que todos, se creía un rey pero en esa vida no era honesto, sentía el miedo de sus enemigos, pues sabía que no estaba obrando bien. Pero que ahora duerme solo y barre las calles que un día fueron suyas. Personas que se olvidan de sus raíces, de lo que eran antes de eso. Alguien que dijo “viva la vida” y se la jugó, jugó a que le adoraran, no haciendo bien las cosas y quedándose sin corona, un rey caído. En momentos como este… ¿Quién quisiera ser rey? Dice la canción, el Rey Luís XVI va a ser decapitado.

Estamos todos desanimados, pues a los que hemos dado el poder, los nuevos Reyes, nos han decepcionado y han creado un reino con miles de Reyes que sólo han hecho que vivir la vida.

Lo malo de los pesimistas, es que casi siempre acaban teniendo razón. Esta vez incluso se han quedado cortos, por lo visto nadie, absolutamente nadie supo prever lo que iba a suceder y la gente de a pie nos sentimos más solos y abandonados que nunca al descubrir que una cantidad ingente de personajes muy bien remuneradas que parecían protegernos y velar por nuestra seguridad y estabilidad no saben nada o saben lo justo para cobrar un sueldo justo, que no es el caso. Con un sueldo justo, y unas apariencias justas, tendrían que protegerse y por lo tanto protegernos. La fuente del problema es que nadie ha hecho bien su trabajo, por eso hay tanta injusticia en todos los ámbitos, en todos, miremos donde miremos. Son los nuevos Reyes que olvidaron sus raíces.

Hay una nueva burbuja, la informativa. Un nuevo Reinado. Miles de personas, periodistas, entendidos, famosos, cualquiera ocupa tertulias y debates hablando de la crisis. Lo tienen fácil, esta situación está generando durante años la suficiente carnaza como para que ellos cómodamente hablen, opinen y nos digan en tiempo real las constantes vitales del enfermo, del muerto (la economía, el pueblo, su sufrimiento y la política).
Se levantan, esperan a que abran las bolsas, esperan la opinión de los políticos de turno de uno y otro país, un par de entrevistas con las victimas y entre tanto y tanto juntas unos cuantos charlatanes que debaten lo de ayer, que digan que negro esta lo de mañana. Entrevistas a un parado, a un desahuciado y ya lo tienes, todos los días, todo repetido a todas horas y en todo tipo de medio. Y, un montón de gente que no entiendo porque si saben tanto, no montan una empresa y se ponen a producir algo, porque sinceramente, todo lo que hacen y dicen no sirve para nada. Tienen la obligación también ellos de buscar un nuevo enfoque, buscar una revolución informativa, para no sentirse como el Rey, que no se sentía honesto.

Entre unos y otros nos tienen cogidos de los huevos, de los ovarios y del corazón porque nadie sabe darnos esperanzas, porque ellos están vendidos y comprados en esta tormenta en la que mucha gente ha encontrado acomodo y siguen otra vez explotando, explotando nuestras miserias con frases apocalípticas los unos, con columnas vacías los otros, y nos consuelan sin abrir la mano y apretando, para que sintamos la presión en nuestros testículos mientras ellos se ganan la vida, viven la vida.

Todo lo que no sea producir, todo lo que no sea crear energía positiva, toda inteligencia que no sea ejecutiva no nos sirve de nada y menos en estos momentos en los que sobre todo hay que remar. Periodistas y comentaristas charlatanes a toro pasado, políticos acomodados que ahora erran todos los tiros porque nunca han vivido bajo presión. Banqueros que no ejercieron su profesión y vendieron lo que no entendían. Especuladores navegantes en un mar permitido por los unos y los otros porque así no tenían que ejercer su trabajo, dedicándose sólo a jugar al monopolio con el riñón caliente. Estáis cagados de vergüenza, como el Rey, pero sabiendo que no os faltará el pan, al arrimo de la crisis. Con vosotros y sin vosotros esto se cae igual, de ahí vuestra inutilidad. Vuestra cada vez más soledad.

En España hay mucha gente, muchas empresas, comercios, escritores, pintores, músicos, labradores, fontaneros, payasos que siguen trabajando, gente buscando trabajo, todos aportan y aportarán cuando llegue la luz, hasta las putas aportan, y todos levantarán, levantaremos este país desde el sufrimiento profundo, porque ahora vivimos reprimidos y asustados. Y todos vosotros seguiréis de cháchara, como siempre, pero esta vez, ya sabemos quienes sois, unos buitres en busca de víctimas.
Alguna vez alguien ha visto a un enfermo en la cama de un hospital, con la televisión, la radio, la prensa hablando a todas horas de su enfermedad y de cómo puede terminar y en la sillas de los acompañantes unos tertulianos diciéndole qué le sucederá si se contagia del enfermo griego, que se va a quedar sin medicamentos, que si se pone peor el médico está de huelga y un montón de calamidades más. Claro que queremos estar informados, pero esto no es información, es contaminación y represión.

Porque no os ponéis a trabajar todos y a crear empleo con vuestro talento y esfuerzo, ese es realmente el drama que tenemos, el paro, en cuando os pongáis a trabajar en algo útil todos vosotros y generéis energía productiva y empleo, todos saldremos adelante, sois conscientes de que hay millones de personas trabajando en el mundo de la cháchara que crean estancamiento, pesimismo, confusión y retraso para llegar a acuerdos por toda la nube negra que formáis y que arrastra a los demás, a los que les falta un punto de personalidad y autonomía. Porqué no medís vuestra contaminación.

Cambiar de registro antes de ser decapitados como el Rey, antes de quedaros solos, de sacaros a todos a barrer la calle. España no esta tan mal, hay millones de personas con un montón de ideas brillantes ansiosos por llevarlas a cabo y muchos que están esperando a que cese la ineptitud y el discurso negativo, sois los mismos que antes generabais el discurso del país rico y con vuestra burbuja informativa fuisteis cómplices de políticos y banqueros.

Bebamos, comamos, disfrutemos, moderadamente cada uno según sus circunstancias. Centrémonos y aprovechemos el tiempo, trabajar, descansar y despejarnos, para poder pensar sin miedo, viendo que un nuevo horizonte se abre, pensando como adaptarnos a él para poder crear prosperidad individual utilizando nuestra inteligencia para crear fines éticos.

Se abre un mundo diferente y todos estamos ansiosos por trabajar en él y aportar, detrás y cubriéndonos el riñón, tienen que estar esta vez los Reyes. Todos los reyes que vivís al arrimo de la crisis. Esta vez nos toca a nosotros VIVIR LA VIDA.

Paco Aviñó

Coldplay viva la vida.

Yo solía gobernar el mundo
Los mares se alzaban cuando yo lo ordenaba
Ahora en la mañana yo barro solo
barro las calles que solía poseer

Yo solía tirar el dado
Sentir el miedo en los ojos de mi enemigo
Escuchaba como la gente cantaba:
«Ahora el viejo rey está muerto, ¡larga vida al rey!»

Un minuto yo tenía la llave
Al siguiente las paredes se cerraban en mí
Y descubrí que mis castillos estaban construidos
Sobre pilares de sal y pilares de arena

Escucho las campanas de Jerusalén sonando
Los coros del Calvario Romano están cantando
Son mi espejo, mi espada y mi escudo
Mis misioneros en un campo extranjero
Por alguna razón que no puedo explicar
Una vez que sabes que nunca hubo una palabra honesta
Así era cuando yo gobernaba el mundo

Fue el viento loco y salvaje
Que tiró las puertas para dejarme entrar
Ventanas rotas y el sonido de tambores
La gente no podía creer en lo que me convertí

Los revolucionarios esperan
Mi cabeza en charola de plata
Solo una marioneta en una cuerda solitaria
Oh ¿Quien podría querer ser rey?

Yo se que San Pedro dirá mi nombre
Nunca hubo una palabra honesta
Pero así era cuando yo gobernaba el mundo.