La bailarina española Tamara Rojo, de 37 años, ha sido nombrada directora artística del English National Ballet (ENB) para un periodo de cinco años. Tomará posesión el próximo 1 de septiembre.
Le he escuchado en una entrevista esta mañana en la radio, emocionada y feliz, dice que la han escogido a ella entre otras cosas, porque los españoles somos muy pasionales y muy trabajadores, por su conexión con artistas de todo el mundo, justo la actitud y los conocimientos que necesitan para sacar a flote el Royal Ballet que atraviesa momentos delicados, la compañía se encuentra inmersa en una profunda crisis de gestión directiva y económica. Los diarios ingleses se hacían eco de la paradoja de las últimas temporadas londinenses del ENB, donde hubo extraordinarias críticas pero un fracaso económico. Todas las esperanzas y ojos están puestos en Rojo, en su capacidad para reflotar la compañía y devolverle tanto su esplendor artístico como su salud contable. Formada en España y salida de la cantera de la escuela y del ballet de Víctor Ullate.
Ahora ha dicho que continuará bailando pues se siente en un momento importante de su carrera personal, siendo una de las artistas de ballet más populares en el Reino Unido. El ENB ya ha anunciado que el primer proyecto será una nueva producción de La Bella Durmiente, el más complejo de los grandes clásicos y un rol que Rojo borda y por el que ha sido muy elogiada por la crítica internacional.
Dicen de ella que Los cuentos de hadas son algo cotidiano en Tamara Rojo. Parte de su trabajo es salir a escena como un cisne embrujado, una princesa durmiente o una muñeca que cobra vida. Y lo hace de manera prodigiosa. Es una bailarina luminiscente, hipnótica, que no puedes dejar de mirar, que se mueve ligera como una pluma y certera como un compás. Pero, sobre todo, que carece de afectación. Rojo hace los ballets clásicos más hondos y humanos. «Son metáforas sobre el significado de la vida y del amor», explica esta canadiense de nacimiento, criada en el madrileño barrio de Chamberí. «Abordan temas universales y siempre relevantes. Nos afectaban hace mil años y nos afectan ahora». Niega rotundamente que las mujeres que los protagonizan sean pasivas. «¡Para nada! En El lago de los cisnes, por ejemplo, la primera mujer ha sido raptada, es una víctima, y la segunda se dedica a manipular a los hombres y a acabar con ellos».
Con su incorporación al Royal Ballet en 2000, Tamara Rojo, a sus 25 años, se convirtió en la primera española en formar parte de la compañía más importante del Reino Unido y una de las más prestigiosas del mundo. Fue, además, la segunda más joven artista en la historia del ballet que asciende al puesto de primera bailarina después de Maya Plisétskaya que ascendió a primera bailarina a los 18 años en el Teatro Bolshói.
Su carrera profesional se ha visto jalonada con diversos premios, tales como la Medalla de Oro y el Premio del jurado en el Concurso Internacional de Danza de París (1994), que consiguió con apenas veinte años; el Premio de la crítica italiana (1996), la denominación de Bailarina Revelación del Año por el Times londinense (1997) y la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes (España, 2002).
En 2001 recibió el Premio a la Mejor Bailarina de los Premios Nacionales de Danza que otorga el Círculo de Críticos del Reino Unido. En 2004 obtuvo el Premio al Valor de los premios Positano «Leonid Massine» y fue nombrada embajadora de la Fundación Hans Christian Andersen de Dinamarca.
En 2005 fue galardonada con el premio Príncipe de Asturias de las Artes.
Tamara añora el sol y la luz de España, añora los cafés y las tertulias de media tarde en las terrazas, añora los amigos españoles y la calle, como no, tambien la comida, después de trabajar duro le gusta compartir, charlar, es incapaz de marcharse a casa después de una función con todo dentro, le gusta salir y sentarse en una buena mesa y disfrutar de la comida, siempre dice que añora los restaurantes y la cocina española.
Seguro que no será fácil, el nivel de exigencia parece estremecedor, se enfrenta a recortes del veinte por cien del presupuesto, que ella dice superara con imaginación y más esfuerzo.
Una noticia llena de color y alegría, un éxito para la marca España en las entrañas de Tamara Rojo.
Saludos a todos. Paco Aviñó.
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